Extracto del último Informe del Banco de España sobre la Evolución Reciente de la Economía Española
25 de enero de 2009 0
El ritmo de avance del producto de la economía española volvió a experimentar una desaceleración muy acusada en el tercer trimestre de 2008. En concreto, la tasa de crecimiento interanual del PIB disminuyó nueve décimas, hasta el 0,9%, mientras que en términos intertrimestrales se registró un descenso del 0,2%, frente al avance del 0,1% del trimestre anterior. Esta evolución fue debida a la fuerte ralentización de la demanda nacional, que no pudo ser compensada por el aumento de la contribución positiva de la demanda exterior neta.
Desde la óptica de las ramas de actividad, el debilitamiento fue generalizado, siendo especialmente intenso en el caso de la construcción. El empleo del conjunto de la economía disminuyó un 0,8%, con lo que la productividad aparente del trabajo repuntó hasta el 1,7%, cuatro décimas más que en el segundo trimestre.
Los indicadores referidos a la parte transcurrida del cuarto trimestre del año indican una continuación del patrón de deterioro de la actividad de la economía española.
El retroceso de la inversión en bienes de equipo se ha intensificado probablemente en el cuarto trimestre, como consecuencia de la debilidad de la demanda, en un contexto en que la evolución de las condiciones de financiación está contribuyendo a desalentar los procesos de gasto empresarial. En esta dirección apuntan la disminución de la utilización de la capacidad productiva en el trimestre final del año y la permanencia del indicador de clima industrial en las ramas productoras de bienes de equipo en niveles muy reducidos en el mes de noviembre.
De modo análogo, los indicadores referidos a la inversión en construcción mostraron una contracción adicional de la actividad.
En los nueve primeros meses de 2008, la necesidad de financiación de la nación se situó en torno a 76,7 mm de euros (un 2,5% por encima del nivel registrado en igual período de 2007), lo que representa un 9,4% del PIB, tres décimas menos que en los mismos meses del año anterior.
Desde el punto de vista de la oferta, los diferentes indicadores disponibles referidos al sector industrial reflejan un empeoramiento adicional de la actividad del sector. El IPI aceleró su retroceso hasta registrar una tasa del –12,5% en octubre en términos corregidos de calendario.
Respecto a los precios de consumo, el IPC redujo en el mes de noviembre en 1,2 pp su ritmo de crecimiento interanual, hasta situarse en el 2,4% (véase gráfico 4). Esta tasa es la más baja de los últimos quince meses.
Durante el mes de diciembre, la situación financiera internacional en la que se desenvuelve el área del euro ha mostrado una leve disminución de las tensiones en los mercados monetarios —pero persistieron en los de crédito—, en el contexto de fuertes recortes de los tipos de interés oficiales por parte de varios bancos centrales, de anuncios de programas de estímulo fiscal en diversos países y de algunos planes de rescate adicionales, como el de Citigroup, por parte de las autoridades de Estados Unidos.
No obstante, el alcance de estas medidas se ha visto atenuado por la incertidumbre sobre la ampliación de las ayudas a otros sectores —en especial, al del automóvil en Estados Unidos—, el deterioro de la mayoría de los indicadores macroeconómicos y la posible repercusión en los mercados del fraude financiero protagonizado por el hedge fund Madoff.
Así, las bolsas, tanto desarrolladas como emergentes, experimentaron cierta recuperación y los diferenciales soberanos, medidos por el EMBI+, han tendido a estabilizarse en niveles amplios.
La confianza del consumidor apenas mejoró en diciembre —continúa en mínimos desde 1980— y las ventas al por menor cayeron notablemente en noviembre.
Por otra parte, persiste el deterioro en el sector de la construcción residencial, a juzgar por la caída de las viviendas iniciadas y de las ventas de viviendas en noviembre, y la continuada evolución desfavorable de la confianza de los constructores en diciembre. A ello se añade el aumento en las tasas de impagos y embargos —especialmente, de los préstamos subprime a tipo variable— hasta niveles muy elevados en el tercer trimestre. El mercado laboral mostró un deterioro mayor que el esperado en noviembre, con la destrucción de más de medio millón de empleos —lo que eleva a 1,2 millones la pérdida de puestos de trabajo en los últimos tres meses— y un incremento de la tasa de paro del 6,5% al 6,7%. euro (−80.000 empleos).
El Consejo de la Unión Europea aprobó en su reunión del 11 y 12 de diciembre el plan de relanzamiento económico propuesto por la Comisión Europea. Este se concibe como un marco para la acción concertada de los distintos Estados miembros, consistente en un estímulo económico de 200 billones de euros (1,5% del PIB), destinados a potenciar la demanda y a restablecer la confianza.
El Banco Central Europeo disminuyó los tipos de interés oficiales en su reunión del 4 de diciembre en 75 pb. Esta decisión supone la tercera reducción en los últimos dos meses, tras las bajadas de 50 pb anunciadas el 8 de octubre y el 6 de noviembre. En conjunto, estos movimientos han supuesto una rebaja de 1,75 pp y el tipo de interés de las operaciones principales de financiación se ha situado en el 2,5%, y los de las facilidades de depósito y marginal de crédito en el 2% y en el 3%, respectivamente.
El Consejo de Gobierno señaló que el descenso de los precios de las materias primas y la marcada ralentización de la actividad económica están suponiendo una atenuación adicional de las presiones inflacionistas. De este modo, se espera que la inflación se sitúe en línea con el objetivo de estabilidad de precios en el medio plazo.
En octubre, el coste de la financiación bancaria a las sociedades no financieras y la remuneración de los depósitos de los hogares aumentaron hasta el 6,14% y el 3,35%, 3 pb y 14 pb por encima de los valores registrados en septiembre. En cambio, el tipo de interés aplicado a las familias en los préstamos para el consumo y otros fines se redujo 13 pb, hasta situarse en el 9,35%, y el de los créditos para adquisición de vivienda permaneció inalterado en el 6,21%.
Categorías: Informes | Etiquetas: Morosidad
Acerca de Elena Melon Crispín
Directora jurídica de Cobro Ágil y CEO de Alter Lex Abogados y Asesores.